Siguen apareciendo aplicaciones para el móvil que lo convierten en un auténtico laboratorio portátil.
Esta vez con ayuda de un "tatuaje" de nanopartículas se puede identificar substancias en la sangre (tambíen aquí), de esta forma es posible hacer desde controles de dopage, hasta controlar el azucar en sangre de los diabéticos (se acabaron los pinchazos).
También se pueden medir tus ondas cerebrales a través del teléfono, por ahora las aplicaciones son limitadas pero podría usarse para mover miembros mecánicos y poder ayudar así a las personas con movilidad reducida o sin ninguna movilidad.
Otra aplicación es el diagnostico de catarátas de una forma barata, esto ayudaría a los países en vías de desarrollo de forma que los médicos no necesiten comprar material extremadamente caro.
En definitiva que el móvil cada vez de está convirtiendo "en algo más" que un simple aparato para hacer llamadas.
S2
Ranganok Schahzaman
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